Lima, (El Peruano)._ Pese a que las acciones discriminatorias son cada vez más rechazadas en el Perú, las cuales son denunciadas a través de varios medios, sobre todo por las redes sociales, es evidente que su práctica sigue siendo frecuente en el plano laboral.

Muchas compañías prefieren contratar personas con apellidos considerados ‘blancos’. Así, los postulantes con apellidos como De la Puente o Camogliano, por citar un par de ejemplos, tienen hasta el doble de respuestas de las empresas que aquellos con apellidos como Chanca y Ccolque. Muchas veces ni siquiera una maestría en el exterior puede contra esta lacra que practican algunas empresas.

Según un estudio elaborado por la Universidad del Pacífico y el Centro de Investigación Económica y Social (CIES), en el Perú existe un 83% de discriminación laboral por la apariencia física. Incluso, las personas consideradas más atractivas pueden obtener una remuneración hasta 17% mayor que aquellas que no son ‘bonitas’. Estos resultados no solo se aplican para postulantes a puestos de atención al cliente o secretarias, sino también para empleos jerárquicos. Las brechas de discriminación son mayores en empleos profesionales que en aquellos técnicos o no calificados. Esto podría estar relacionado con la escasez de mano de obra en estas categorías. Sin duda, estas acciones son producto de las malas políticas en la gestión del talento implementadas por algunas empresas o sus mandos medios encargados de la selección de personal y reclutamiento. Más de una vez hemos sido testigos de avisos denigrantes que solicitan personal con ciertas características, entre ellas el aspecto físico y la procedencia académica. Si bien existen otras maneras más sutiles de segregación laboral como la educación, la edad o el lugar de residencia, por lo general las principales razones de discriminación laboral son la apariencia física y la procedencia social.

Otros factores de discriminación en el trabajo son también el género, sobre todo para puestos de alta dirección y gerenciales, y la orientación sexual. La entidad encargada en sancionar las prácticas de discriminación laboral es el Ministerio de Trabajo, que cuenta con una guía de buenas prácticas en materia de igualdad y no discriminación en el acceso al empleo y la ocupación. Esta entidad tiene la facultad de imponer sanciones a las empresas que cometen actos de discriminación, por lo que realizan constantes inspecciones. Además, tienen una oficina de denuncias, la que también las puede recibir vía teléfono y por su página web.

Artículo por RICHARD CENTENO TORRES.